lunes, 21 de marzo de 2011

Monarquía vs República

Suele decirse que con el tiempo las cosas se pueden analizar con mayor frialdad y objetividad. En el caso que me propongo tratar, la continuidad de la monarquía en España, ya ha pasado tiempo suficiente no sólo para reflexionar sobre ello sino también para plantearse a fondo el tema. Pero ante todo, conviene subrayar que estas líneas que van a ser escritas no son ni una tesis a favor de una forma de gobierno u otra, ni una crítica a la monarquía española; simplemente son cuestiones que yo me planteo acerca este curioso árbol con ramas dispersas llamado España.


Racionalidad política
Si partimos de la base de que la razón juega un papel importante dentro de la política, y por tanto, también dentro de los propios sistemas de gobierno, la monarquía es un sistema completamente irracional. En una forma de gobierno monárquica, lo que importa no es la decisión del pueblo o del propio individuo, sino la suerte. El rey, a no ser que las circunstancias lo eviten, ya nace siéndolo. Es decir, al ser una cuestión de sucesión no interviene en ningún momento la razón, sino que por propia herencia familiar ya asume el cargo de jefe de Estado. Por esta misma razón es un sistema irracional, ya que en ningún momento interviene la voluntad y el juicio del pueblo. Ya no solo porque no participen los ciudadanos, sino que dentro del propio sistema monárquico tampoco existe racionalidad alguna. La monarquía parte de la base de que el jefe de la tribu, por llamarlo de alguna manera, ya viene dado y aceptado de antemano. De ahí a que internamente sea un sistema impuesto entre los propios que lo conforman.


Pero yendo a un aspecto de mucha más importancia para el hombre, la monarquía puede ser o no un sistema con libertades. Ahora mismo estamos acostumbrados al sistema de monarquía parlamentaria, que es el que existe en España, pero también existen otros tipos de monarquías que no son precisamente democráticos como pueda ser el absolutismo. Por otro lado, en las monarquías híbridas el monarca no tiene el completo poder pero si dispone de una gran influencia política. En España, la monarquía parlamentaria aplica la famosa frase “el rey reina pero no gobierna”. Esto no deja de ser otra irracionalidad más porque un jefe de Estado no puede caracterizarse por estar al margen y dedicarse únicamente a funciones representativas.

¿Cuál es la conclusión de los distintos tipos de monarquías? A mi juicio, la monarquía absoluta, desde el punto de vista político, tiene algo de sentido. La monarquía híbrida no deja de ser un absolutismo camuflado en un supuesto sistema parlamentario. Pero sin duda alguna, la monarquía parlamentaria es el sistema más irracional ya que, en términos metafóricos, es como un humorista que no hace gracia ¿se le podría llamar humorista?


Monárquico no, Juancarlista
Es uno de los argumentos que muchas personas dan para defender la monarquía en este país. En un principio puede parecer un razonamiento un tanto extraño porque si Juan Carlos I es el Rey de España, y el rey es el mandamás de la monarquía, entonces todos aquellos que se consideran Juancarlistas ¿no deberían ser por lógica pura monárquicos? Solo encuentro una explicación medianamente coherente a esto: la monarquía en España no ha venido dada por un sistema de sucesión hereditaria, sino por imposición de un dictador militar cuyos propósitos no eran precisamente los que llevó a cabo Don Juan Carlos. De ahí a que mucha gente valore al rey por haber dado el paso a esta supuesta democracia que tenemos hoy en día y no haberse convertido en Franco 2.


Otro posible razonamiento sería el miedo o rechazo al concepto de república que hay en España. Cuando millones de españoles ven en el rey un sinónimo de estabilidad, calma y tranquilidad social es precisamente porque la monarquía parlamentaria está al margen de todo tipo de controversia o decisión que pueda manchar su imagen. La palabra república en España huele a viejo y hace recordar ciertas cosas de nuestra historia que no agradan, por lo que el cerebro humano español opta por lo fácil: una forma de gobierno la cual se esté quieta. Esto es algo que si verdaderamente queremos avanzar debería corregirse. La república no es más que otro sistema de gobierno. Ni debería asociarse con la extrema izquierda, ni con la persecución católica, ni con nada de eso. Pero lamentablemente pueden más los errores del pasado que un planteamiento racional del futuro.


Rinoceritis española
Resumiendo el concepto de rinoceritis, el cual consiste en que el hombre a base de hacer algo habitualmente lo termina viendo normal cuando en realidad es una locura (rinocerontes paseando como Pedro por su casa por las calles), llego a la conclusión de que algo muy similar ha ocurrido con la monarquía en España. Salvando las distancias entre la esquizofrenia que sería aceptar como normal ver a rinocerontes campando a sus anchas por la calle, la monarquía ha alcanzado un nivel de aceptación espectacular.


Hablando en términos publicitarios, la sociedad ve como normal y hasta apetecible el producto que nos ofrecen. Es decir, la oferta de “llévese una democracia con monarquía impuesta” ha sido aceptada sin ningún tipo de reflexión. Incluso gran parte de los intelectuales justifican esto como un pack democrático.
Está claro que poniéndonos en contexto, lo mejor para todos era acceder y en ese sentido lo veo una postura inteligente, pero no deja de ser sorprendente cómo se ha aceptado la situación.



El futuro depende del pueblo
Con todo lo que ha llovido desde 1978 cabe plantearse lo siguiente: ¿es el momento de cambiar el sistema? Siendo realistas, dentro de poco habrá una sucesión en la corona, el rey abdicará y su hijo le sustituirá. La cuestión no es si Felipe está suficientemente capacitado para ejercer el cargo. De hecho, esa inquietud es, si se me permite, un poco absurda porque en un sistema en el que el rey reina pero no gobierna no es necesaria una alta capacidad de mando.

Muchos piensan que España le debe mucho a Juan Carlos y que sin su actuación habría sido imposible dar el paso a la democracia. Yo, sin ser precisamente un gran admirador de la monarquía, aprecio su labor y creo que hizo lo correcto. Demostró patriotismo y coherencia. Por tanto, hasta ahí se puede considerar como aceptable la figura del rey ya que ha hecho algo por todos. Pero el hecho de tener que aceptar a un sucesor simplemente porque ya viene estipulado así no deja de molestarme. ¿Qué ha hecho Felipe (que por lejano que suene, será el rey de España) para merecer ser el jefe de Estado? Es el hijo del rey, y por ello hay que aceptarlo, pero no por eso dejaremos de opinar y juzgarlo cada uno a nuestra forma.


Lo más racional y que a la vez sería un gesto de madurez democrática sería proponer un referéndum orientativo para saber qué opinan los españoles. Digo referéndum orientativo porque no se trata de hacerlo para cambiar el sistema de la noche a la mañana, sino para conocer la visión del pueblo. Con el resultado de dicha encuesta nacional entonces ya se podría actuar en consecuencia. ¿Es esto un guiño al sistema republicano y en consecuencia a la Tercera República española? No. Únicamente es un planteamiento político y social más. Que nadie se escandalice, porque lo que yo opine sobre cual es la mejor forma de gobierno a nadie le interesa. Y si así fuese, vivo en un país libre en el que puedo tener
mis propias ideas. Porque es así ¿no?

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