jueves, 4 de agosto de 2011

Sucios


Todos esos que se las dan de diferentes, extravagantes y abiertos a todo tipo de perversiones mentales me gustaría que algún día se diesen cuenta de lo tremendamente cobardes e hipócritas que son. Qué fácil es presumir de algo desde el otro lado de la pantalla.

Claro, está la protección de que nadie podrá hacer de tu supuesto mayor sueño tu peor pesadilla. Qué divertido resulta jugar cuando eres tú quien domina los mandos ¿verdad?. Sin embargo, un día te encontrarás en un espacio reducido, con las manos atadas, una venda en la cara y ya no tendrás el control. Sencillamente porque no tendrás la opción de seleccionar los juegos que más te apetezcan en ese momento.

Alguien te demostrará que todo aquello que durante un tiempo fingiste que te gustaba no es tan morboso ni divertido como en su día pensaste. Entonces querrás pinchar en la parte superior derecha de tu pantalla esa cruz que tantas veces te ha salvado el culo (perdón por la vulgaridad). Pero ya no podrás. ¿No era lo que te gustaba? ¿No tenías tanta facilidad para hablar de ello? Pues ahora puedes vivirlo en carne y hueso.

Pobres almas infelices que necesitan aparentar ser el terror cuando ellos son los primeros que se aterrorizan por todo. Podríamos denominarlos como sucios ‘light’. Es decir, son sucios hasta cierto límite. Si ven que la suciedad que tanto les gustaba es peligrosa entonces le dan al stop. Se queda todo en pensamientos. No van más allá porque es todo una mascara lo que llevan y el día que se la quiten tendrán vergüenza de mirarse al espejo.

- Esto es muy raro.
- Te gusta lo raro.
- (…) No tan raro.

(La falsa excentricidad es la mayor de las simplezas)

No hay comentarios:

Publicar un comentario